jueves, 20 de septiembre de 2007

En conexión con el Ser Supremo



La religión original del ser humano es la paz, sin importar que éste sea cristiano, musulmán, hindú o judío. Esta afirmación, hecha por Shashi Mehra, de la organización Brama Kumaris, quiere dejar dicho que -por ende- todos buscamos la paz, porque nuestra cualidad original es ser pacíficos y puros.
Esta entidad, presente en 100 países alrededor del mundo, y llamada la “Universidad Espiritual Mundial”, tiene como objetivo principal el de sentar conciencia en la gente sobre su valor interior y sus poderes mentales, y se encuentra en el país desde hace dos años.
Sashi Mehra explica que todos tenemos una personalidad de paz y de amor, pero que la misma “está tan escondida que no emerge hacia fuera” y que esto obliga a que el ser humano esté constantemente en la búsqueda exterior de ambas.
Continúa planteando que hasta ahora eso se ha estado buscando en cosas “pasajeras físicas y materiales”, pero que al final todo eso es temporal. “Esperamos que la gente nos ame, pero no somos felices”, porque -a su parecer- hay que entender que el ser humano debe amarse a sí mismo primero. Amarse, explica la coordinadora de la sede de Brama Kumaris en Londres, significa mejorar el ser y dejar las superficialidades de adentro y surgir hacia fuera, desarrollarse para mejorar. En ese orden de ideas, se plantea que todos tenemos muchas cualidades y valores escondidos, “pero raramente los usamos”:
Mehra sostiene que esto es difícil, puesto que cuando se da amor, esto se hace partiendo de expectativas, y “cuando no se llenan, este se retira y uno se siente mal”, por lo que es necesario aprender a dar sin esperar.
De ahí que es necesario aprender a que ese amor puro surja y que debe tenerse una fuente permanente de amor, que es Dios, “y tengo que aprender a conectar con Dios y llenarme con su amor”, a través de la meditación.